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Un análisis de la economía estadunidense plantea que la venta de autos en ese país podría establecerse en 2012 en los 14 millones de vehículos facturados. Pero en esa loca carrera de las intepretaciones los estudiosos han pasado por alto que si Grecia estalla como ejote (las quiebras no se globalizan como el comercio), la «contaminación económica» puede dar al traste de tan estruendosos planes de crecimiento.
Ventas boyantes si y siempre sí la crisis europea no contamina a la economía estadunidense (Foto archivo).
El análisis de Bloomberg y Automotive News está lleno de consideraciones propias de la economía estadunidense. Se quisieron olvidar por un fin de semana de lo que pasa del otro lado del Atlántico, concretamente con los casos de Grecia y pronto España.
Consideraron sí, que la demanda de vehículos automotores ha crecido. Que las fábricas están llamando a más y más empleados nuevos para sumarse a la euforia de producir más y más. La evaluación de abril indica que se alcanzarán las ventas de 14 millones de unidades para este año. Que si bien no se logrará aún aquella cifra récord de 16.2 millones de hace ocho años, sí se rebasarán los 13.1 millones originalmente esperados para el año.
La producción automotriz en Estados Unidos superó el 2.2% del PIB en el primer trimestre del año.
La euforia gana al análisis sobre las ventas de autos en Estados Unidos. Algunas casas consultoras dicen de plano que el «crecimiento duradero y robusto» de la economía del otro lado del Río Bravo va viento en popa y ello motivará que las fábricas de automóviles (¿las armadoras arman y las pintoras pintan?) sigan contratando personal para incrementar su producción.
«Estamos empezando a ver la chispa en el sector del automóvil que le faltaba al principio», dice otro de los optimistas obseradores en el análisis que hacen las fuentes arriba citadas. Bien sabido es que hay lobbistas (los que hacen labor en el recibidor de los grandes salones de la cámara de diputados o senadores) para todo. Los que convencen de una mentira dicha muchas veces hasta que se «convierte» en «verdad». Que la realidad se encarga de desmentir.
Otro factor que está ayudando a que mejoren las ventas de automóviles en Estados Unidos son los planes flexibles de la banca, que han reiniciado el proceso de préstamos para la adquisición de autos nuevos. El crédito se reactiva y los estadunidenses aprovechan esas condiciones para renovar el viejo auto que tenían en la cochera, pues muchos desde la crisis del 2008 tomaron la decisión de quedarse uno o dos años más con el auto usado y posponer la compra de uno nuevo. En ese sentido, el aumento del parque vehicular con unidades de 2010 para abajo, creció sorpresivamente. Este elemento no ha sido considerado por esos analistas en su euforica lectura de los acontecimientos recientes en el vecino país.
Pero hay otros que de plano dicen que la aparente mejora es parte de un plan para la reelección del presidente Obama. Y, por tanto, el fenómeno de optimismo es temporal mientras se concreta el proceso de repetición del mandatario en ese país. Los adversarios han criticado que Obama haya prestado miles de millones de dólares a GM y Chrysler para salir adelante.
La supuesta bonanza en las ventas automotrices en EEUU ha beneficiado a México que en abril aumentó más del 30% el ensamble de vehículos, sobre todo los que se destinan a ese mercado, siendo de los más exitosos los casos de Ford con su Fusión producido en Hermosillo, de VW co el nuevo Jetta fabricado en Puebla y de Nissan con el Sentra ensamblado en Aguascalientes.
Grecia debe ser analizado todos los días. Su salida de la Unión Europea, el regreso a la moneda local dejando al euro como moneda oficial y el proceso de bancarrota, puede contaminar a todos los países del área y, en unos meses más, al resto de las economías boyantes.
India y Brasil ya muestran un desaceleramiento de sus respectivas economías.
