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La agencia japonesa Nikkei logró la primera entrevista que el encarcelado Carlos Ghosn ha podido realizar con un medio de comunicación. El expresidente de Nissan acusa a varios de sus compañeros directores de armar un complot y una traición en su contra para evitar la fusión con Renault.
Carlos Ghosn acusa un complot y una traición de sus compañeros de Nissan (Foto de agencias).
El pasado 30 de enero le fue abierta la reja de la prisión a un reportero de Nikkei para acceder al magnate automotriz. Ese día Ghosn cumplió 73 días en que ha recibido un mal trato, ha bajado de peso y se muestra enfermizo.
Como sus hijos en su momento lo hicieron, el ex presidente de Nissan pero también de Renault y de Mitsubishi, incluso de Autovaz de Rusia, considera que Nissan Motor le armó el escándalo para culparlo a fin de evitar que este año 2019 se concretara una fusión entre Renault y Nissan (con Mitsubishi a bordo). Especialistas indican que la ganadora de esa fusión sería la francesa toda vez que poseé el 43% de acciones de la nipona. Había que detener ese camino y la mejor forma era teniendo a Carlos en prisión.
Que a Hiroto Saikawa no le gustaba la idea de sacar a Nissan de Japón.
En sólo 20 minutos de entrevista, Ghosn se defendió: «Lo único que intentaba era deshacerse de mí». El ejecutivo manejaba con éxito la operación con Renault y Nissan para pasar de una alianza a una fusión donde dejarían de haber dos capitales, dos mandos y dos formas de operación individual para hacerse una sola compañía. Nissan evitó eso a toda costa.
En septiembre Ghosn se reunió con Hiroto Saikawa, director de Nissan. Le dijo que el paso a la fusión tendría que ser con una primera autonomía de las marcas pero un sólo mando administrativo con oficinas fuera de Japón. Meses después Saikawa evitó la presencia de Ghosn en sus juntas con Mitsubishi. Al parecer, tampoco a los directivos de esta marca les agradaba lo que Ghosn iba a hacer.
