Pide GM apoyo europeo por $4,900 mdd para salvar a Opel

Nick Reilly, director general de Opel AG, ha dicho hoy en Frankfurt del Main que la empresa hará el esfuerzo de respetar las fuentes de empleo y reducir su pronóstico de despidos de 10,000 a 9,000 ó 9,500, pero requerirá de ayuda estatal europea por $4,900 millones de dólares para rescatar a las nueve plantas en siete países.

Por su parte la canciller Ángela Merkel declaró hoy mismo en Berlín que General Motors ya le había regresado los $1,500 millones de euros que el gobierno alemán facilitó para la operación de venta de Opel a la firma de autopartes Magna International, acuerdo que fue roto por GM hace tres semanas.

«Espero por lo menos una carta de agradecimiento de General Motors en los próximos años», dijo hoy una sarcástica Ángela Merkel. Y refirió: «Los alemanes no han perdido un centavo de la operación con Opel».

GM se sentía preocupada porque el banco ruso Sberbank fuera finalmente el poseedor de la tecnología de Opel que es compartida para las demás marcas del grupo estadunidense (Buick, Cadillac, Chevrolet y  GMC). Aunque esto nunca fue revelado explícitamente por la oficina en Detroit.

El plan que le costará a GM $4,900 millones de dólares, contempla la reducción de la producción en las dos plantas de Vauxhall en Inglaterra, una en España, en Figueruelas, otra en Bélgica, tres en Alemania, una más en Polonia y la de Rusia también. Son nueve en total. Al reducir de 20 a 25% el ensamble de modelos, significa que tendría que quitar tres plantas mínimo. Pero podría hacer un arreglo para que todas las ensambladoras aporten una baja en el número de empleados y no tener que sacrificar nave industrial alguna. Esta es sólo una hipótesis que será comprobable en los próximos días.

Reilly se reunió ayer lunes con representantes de la comisión de competencia de la Unión Europea a quienes dijo que para sacar adelante las operaciones de Opel requerirá de apoyos financieros estatales de los países donde opera la filial, para salir adelante.