No se reestablecerá producción japonesa en China antes de julio

Una investigación de Toyota Motor de Japón indica que la producción de las empresas niponas en China no se reestablecerá antes de julio del 2013. Los consumidores chinos han reaccionado negativamente hacia los productos japoneses por el conflicto político-militar por el que ambos países se disputan dos islas, Senkaku y Diaoyu.

Todo comenzó con una propuesta japonesa para comprarle a China una isla en litigio, Diaoyu. Cuando nipones colocaron su bandera, China se ofendió y exigió el retiro inmediato del baluarte, hace unos meses.

El siguiente paso fue una corriente de los consumidores chinos que, avenganzados, se dieron a la tarea de bloquear la compra de productos hechos en Japón o hechos en China pero de orígen nipón.

Esa situación ha generado que las empresas automotrices japonesas, como Toyota, Honda y Nissan, entre otras, bajen considerablemente.

Toyota mandó a hacer un estudio sobre las repercusiones que tendrá el fenómeno político-militar para con sus ventas. Dice el documento que la producción automotriz china no volverá a sus estándares de hace dos meses sino hasta julio de 2013. Eso si las complicaciones entre China y Japón por el conflicto territorial no se aceleran.

De octubre a diciembre las ventas de plantas niponas en China pueden bajar hasta un 30%. En un país donde se venden 20 millones de autos y camionetas al año, es una gran pérdida.

Japón, dice Bloomberg, autora de la información, no ha terminado su tsunami, sino que ahora, aunado a la alta paridad del yen, la baja de ventas japonesas en China se suman a los siniestros de marzo del año pasado. Es otra vez regresar a la crisis para las empresas.

Un escenario pesimista dice que las ventas pueden caer hasta 50% de aquí a julio, mes en el que se considera que las cosas se pueden normalizar entre ambos países.

Y otros analistas han dicho que, este fenómeno, retraerá la producción automotriz de China en un 17% para este año.