Aunque nunca aclaró el estatus en el que se mantiene en Beirut, capital de Líbano, el ex-presidente de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, Carlos Ghosn, ha dado una conferencia en enero 8 en ese país para reiterar su inocencia de las acusaciones de Nissan en su contra, así como buscar limpiar su nombre y defenderse luego de su huída desde Tokio en diciembre 30 pasado.
Carlos Ghosn este 8 de enero en Beirut (Fotos de agencias).
El ejecutivo convocó a unos 90 periodistas que se han dado cita, luego de una invitación rigurosa y personalizada, a una rueda de prensa en la capital libanesa, luego de huir de la custodia en Tokio, Japón, el pasado 30 de diciembre. Lo primero que aclaró es que las autoridades niponas se han dejado manipular por la situación en Nissan y que confía poco en las leyes de ese país para recibir un trato justo y legal.
Ese fue el motivo por el que huyó de la vigilancia que le permanecía en arraigo domiciliario por muchos meses, habiendo pagado una cuantiosa fianza para seguir su juicio desde su casa. Pero el 30 de diciembre huyó en una valija desde Tokio luego de una recepción de música y escondido en uno de los contenedores mediante un estructurado plan para evitar la vigilancia que se le mantenía durante las 24 horas del día. Los abogados de Ghosn habían exigido el respeto a sus derechos humanos pidiendo que no fuera asediado por la vigilancia. En un afloje de esa estricta custodia, el señor Ghosn pudo huir co pasaporte francés a Turquía y de allí a Beirut, han reseñado diversas fuentes mundiales.
La que se presume es la casa donde vive actualmente Carlos Ghosn en Beirut.
Carlos Ghosn reiteró ante la prensa que le ha sido conformado un complot para expulsarlo de Nissan. Se refirió en su larga exposición a la labor que realizó el anterior CEO de la firma nipona, Hiroto Saikawa, por montarle todo un aparato en su contra. Por cierto, Saikawa ya no labora más en Nissan luego que se hizo sospechoso de algunas prácticas desleales al grupo empresarial al que servía.
«Estoy aquí para limpiar mi nombre» les dijo Ghosn a los periodistas. Voy a demostrar que todas las acusaciones falsas en mi contra son mentira. Nunca debí ser arrestado, se violaron mis derechos humanos, permanecí 130 días confinado en Tokio, Japón, recibiendo un mal trato en la prisión, con un sistema judicial japonés manipulado, discriminatorio y violador de los derechos humanos», ha sintetizado el ex-ejecutivo de orígen brasileño pero con las nacionalidades francesa y libanesa.
Nissan no ha dado a conocer ninguna posición respecto a las declaraciones de Carlos Ghosn, quien tiene negocios en Lïbano como algunas casas y una empresa vitivinícola.