Prueba de manejo: Gabriel Covelli / Texto: César Roy Ocotla
¿No se ha fijado que hay camionetas utilitarias que se manejan como automóviles y a veces se nos olvida que el centro de gravedad está arriba y que se corren riesgos? SEAT Altea Freetrack 2013 es un auto que olvidó ser camioneta. Se maneja con dinámica, con delicia, con ganas de no bajarse de ella. $319,300 su precio.
SEAT Altea, deportiva, no demasiado grande, práctica (Fotos Al Volante).
SEAT Altea se presenta en versiones XL y Freetrack. Preguntamos ¿por qué Freetrack? No tiene tracción en las cuatro ruedas, sólo en dos. Pero trae las fascias en color gris para que, cuando usted la meta al lodo, al campo, se pueda limpiar fácilmente esa zona de la camioneta. Así pues, se concibe como una camioneta paseadora. Pero nada más alejado de la realidad que nosotros notamos. La Altea Freetrack es una camioneta que olvidó que era coche, o al revés. Se maneja como auto y usted olvida en ciertos momentos que trae una camioneta.
El diseño no es lo más privilegiado que digamos.
Ya sabe que el corazón del vehículo es su motor y tren motriz en conjunto. Este motor es un cuatro cilindros de 16 válvulas 2.0 litros inyección directa de 211 HP a 5,300 rpm, turbocargado, y torque de 280 Nm a 1,700 rpm, transmisión de doble embrague DSG de seis velocidades, dirección eléctrica, frenos de disco ventilados adelante y sólidos atrás.
Luces traseras tristes…
Con razón. La dinámica de manejo se logra formidable. El vehículo está muy bien equilibrado, te permite llevarlo dentro del límite sin que te haga ningún extraño en la carretera. Estamos en la México-Cuernavaca, pero en el camino libre, con esas curvas sinuosas que nos permiten probar realmente vehículos. Los sistemas activos de seguridad hacen su trabajo pero el vehículo nos permite probar los límites sin entrar en acción. Cuando tienes encima el control de estabilidad, pues ya no puedes hacer nada, pero este sistema entra en un momento determinado precisamente para apoyar a aquellos que en el manejo no tienen mucha experiencia.
Motor 2.0 litros turbo 211 HP. Con razón vuela.
Para el curveo nos ayuda un sistema de suspensión independiente MacPherson adelante y trasero con eje multibrazo con muelles. Es esa geometría que no permite que haya coleos, que pierdas la camioneta. Esta es alta, pero no tanto como aquellos camionzotes que la verdad hasta dan miedo de que se vayan a voltear. Se maneja como auto, vas subido como en camioneta, pero no muy grande, vea las fotos.
Tablero sencillo con lo necesario.
Rin 17 en ruedas con llantas 225/50, algo anchas. Las llantas no deben ser ni demasiado anchas porque entonces arrastras hule, ni demasiado delgadas. Se les pasó la mano un poco en eso, tal vez por la estética, más que por la práctica, pero bueno…
El consumo según la computadora de viaje es de 12.2 Km/l para ciudad y 20.5 para carretera, pero este factor no lo comprobamos al cien. Recuerde que todo esto es relativo por la calidad de combustible, hábitos de manejo, semáforos en rojo, aire acondicionado, litros de medio litro y muchos factores más. Ya no pregunte por qué no tiene el rendimiento que debiera, son factores que influyen.
Palanca con modo manual seis velocidades DSG.
La cajuela es grande, de 532 litros, suficiente espacio para las maletas.
El asiento es muy cómodo, el volante tiene profundidad y altura, bien por estos dos aspectos ya que el asiento lo envuelve a usted y permite que no se vaya de un lado a otro en las curvas. Lo sujeta.
Gabriel Covelli recuerda el manejo de esta unidad en Madrid, España, pero en la versión diesel. Recuerda que siempre se manejó bien. Traía entonces tracción en las cuatro ruedas.
No hay pantalla ni cámara, no las necesita, en verdad.
SEAT nos ha dado el ejemplo de que, cuando una marca se aboca a utilizar el automovilismo deportivo como un laboratorio de pruebas, los resultados son tácitos. Gracias a su presencia en el Campeonato Mundial de Autos Turismo en Europa, sus vehículos son dinámicos y excepcionales en esa dinámica de manejo, en la movilidad, en la acción sin decir que no, ni «tropezarse». La Altea no sale de este esquema de visualización de los vehículos españoles.
Controles de espejos, control estabilidad y llantas y cerradura.
La llanta es tan importante, nos explica Covelli, que es importante darse cuenta del ángulo de agarre, ya que las llantas se doblan (¿y por qué no se ponchan si se doblan? pues porque están diseñadas precisamente para doblarse pero no romperse de la parte que va pegada al rin). Slip, es el efecto que se logra en las llantas. La deriva es importante, como los veleros cuando doblan dirección. Se llama efecto a la deriva porque causa un vacío entre la vela y el aire, que es el que empuja la vela. En la llanta, hay un doblez, pero hay un agarre al piso. La llanta se agarra, pero aprovecha ese ángulo de agarre. No hay que tener miedo de doblar la llanta, para eso está hecha.
La parte trasera es amplia.
El turbolag, efecto de retardo del turbocargador que se alcanza hasta las 1,700 rpm, es uno de los pocos inconvenientes. Si usted estuviera en las carreras y el coche no le respondiera cuanto antes, usted se desesperaría y pareciería un Webber cualquiera como en la Fórmula Uno. Luego del turbolag, todo es excepcional.
El maletero es amplio.
La unidad, en automático se maneja en regímenes bajos, 2,000 rpm y vamos a 90 Km/h. Con ese rango sí se ahorra gasolina. La caja DSG hace bien su función. Los turbos para alcanzar alta compresión necesitan a fuerzas gasolina Premium, no lo olvide. Si pone Magna, va a tener cascabeleo del turbo. Gasolina de alto octanaje es necesario.
La parte de frenos es precisa. Este es un chasis del León en el Altea.
Los frenos son efectivos. Discos en las cuatro ruedas.
Le comento a Covelli el agarrón que traemos en los foros con la calidad de SEAT y la de VW. Me dice que están parejas las marcas. Lo que los alemanes saben también lo saben los españoles, son marcas hermanas. No hay diferencia.
SEAT es un buen producto, sobre todo deportivo.
Anguloso, musculoso.
La calificación de Gabriel Covelli es de nueve. Magnífico vehículo del que no entramos en materia con las chacharitas que le acompañan, pero eso usted lo puede checar en www.seat-mexico.com.mx Aquí le hemos dado la sustancia de manejo, que es lo que finalmente importa en un auto.
Y si lo quiere comparar, pues es mejor que Escape y otra cosa diferente a Tiguan. Hay que manejarlo.
… pero a muchos les gusta.