Este martes, después de una misa de cuerpo presente a las 10 horas en el velatorio Lomas Memorial Santa Fe, los restos del piloto mexicano Carlos Alberto Pardo Estévez serán trasladados al Panteón Español para ser cremados, informó el equipo Motorcraft de Tame Racing a través de un comunicado de medios.
José Manuel Pardo Otero, padre de Carlos, viajó de Madrid vía París a México para dar el último adiós a su hijo. La mamá del piloto fallecido no pudo venir en el viaje por motivos de salud.
Rubén Pardo Estévez, hermano de Carlos y compañero de equipo en la Nascar Corona Series, está inconsolable. No pudo recibir más que a la familia nuclear más cercana a Ana Cecilia Muñoz-Ledo Zapata, esposa de Carlos, así como a algunos contados amigos íntimos.
“Pedimos la comprensión de todos los amigos que han venido a darle el pésame a Rubén Pardo, así como a los representantes de los medios, pero la familia está viviendo momentos muy difíciles. Sé que contamos con su comprensión”, dijo Luis Alberto Tame, director del equipo Motorcraft y Tame Racing, quien es una de las personas que han estado más cerca de Rubén.
Andrés Solares, cercano amigo de Carlos en los últimos 15 años, dijo que “hay una enorme consternación en el medio automovilístico del país. Para mí se ha ido mi mejor amigo, y para el automovilismo un gran piloto, de gran valía y cuyo hueco no podrá ser llenado por nadie en muchos años”.
La gran mayoría de pilotos de la plantilla de la Nascar Corona Series, pero también los pilotos de abolengo, de los veteranos como un Jaime Williams acompañado de su hijo del mismo nombre, Miguel Reyes, de Hidalgo, Adrián Fernández, Luis “Chapulín” Díaz, Alfredo Galland, Paco Aguilera, los comentaristas Tony Menchaca, Marco Tolama;Patricio Jourdain, Freddy Tame (prácticamente todos los Tame estuvieron presentes), Rubén Rovelo, padre e hijo, y el propio Jorge Goeters, ex compañero de escudería de Carlos Pardo, se dieron cita para estar con él y con su hermano Rubén.
Se calcula que aproximadamente 500 personas del medio automovilístico, incluidos compañeros de la prensa y los integrantes del equipo Motorcraft en pleno, se presentaron a dar el último adiós al piloto capitalino,
Ana Cecilia Muñoz-Ledo Zapata (34), esposa de Carlos Pardo, también pidió la comprensión de todos en este trance de dolor.
Curioso: Este jueves Rubén Pardo cumplirá 30 años de edad y la hija de Carlos, Luciana Pardo Muñoz-Ledo, tres años en unos días más. Andrés Solares y los Pardo ya organizaban la fiesta. “Carlos me decía que iba a ser doble celebración porque estaba seguro de ganar la carrera de Puebla pues es un óvalo rápido, como a él le gustaba que fueran, y sentía que el triunfo iba a ser suyo”, dijo con lágrimas en los ojos Solares en el velatorio.
No se equivocó Carlos Pardo: La Nascar de Puebla fue de él, con la bandera a cuadros hacia el cielo.