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El presidente de Estados Unidos Barack Obama salió al corredor de la Casa Blanca en Washington el día de hoy para anunciar formalmente una alianza estratégica entre el grupo italiano FIAT y la automovilística norteamericana Chrysler que esta mañana se declaró en bancarrota para acogerse a la protección gubernamental. Tienen 30 días para anunciar un acuerdo concreto, dijo.
Chrysler tiene 30 días para concretar un acuerdo con FIAT, aunque Sergio Marchionne, presidente de la italiana, ha dicho que la empresa norteamericana requiere antes de la formal alianza, alcanzar un total acuerdo con la parte laboral afiliada al sindicato UAW. Bob Nardelli, presidente de Chrysler ha dicho que ese acuerdo está listo, pero no hay documento que avale dicha declaración.
La declaratoria del presidente Obama se da en momentos en que Chrysler está a punto de la desaparición pues el gobierno no quiere gastar más en una empresa que está estructuralmente mal. Por ello, esta mañana se anunció la bancarrota de Chrysler que se acoge al capítulo 11 con la protección gubernamental para evitar el saqueo por parte de los especuladores financieros.
También se da en una rara situacion creada por la Chrysler que desde que dijo en enero que ya tenía un acuerdo con FIAT, esta firma nunca emitió un comunicado oficial aceptando tal alianza formal. Ha sido la declaración del presidente Obama hoy, que llama a que eso se concrete. Les da 30 días para correr el velo cdxe las mentiras o las verdades sobre esa estrategia.
También se da en momentos en que FIAT le ha mostrado a GM su interés por adquirir a la filial alemana Opel en una situación también de bancarrota para la primera empresa norteamericana del automóvil.
Obama le apuesta a salvar los más de 50,000 puestos de trabajo que genera la Chrysler, por lo que espera una respuesta clara de FIAT. «La bancarrota no es un síntoma de debilidad sino de dar un paso», dijo Obama a la prensa esta mañana en Washington.
El mandatario, que pareció esta mañana ser el portavoz de Chrysler, criticó a aquellas financieras a las que la firma les debe dinero, que no quisieron negociar la baja a un tercio de la deuda que tiene la empresa con ellas. JP Morgan fue una de ellas, y fue duramente criticada por el presidente Obama.
También fue crítico para Chrysler al señalar que la empresa ha dejado de ser popular y ha dejado de pensar en los consumidores. Ahora, dejó entrever, se trata de salvar los 30,000 puestos de trabajo directos y otros 20,000 indirectos de la base de proveedores.
En México, como es costumbre, esperan indicaciones de Detroit a través de un comunicado oficial.
Chrysler de México cuenta con tres complejos en el país: Derramadero, Ramos Arizpe, las dos en Coahuila y Toluca, Estado de México. En las primeras dos plantas produce camionetas pickup mientras que en las cercanías de la Ciudad de México se produce el PT Cruiser.
