Aún afinando estrategias y a cuatro años de su llegada a México Laurent Tasté se despide de la dirección de Peugeot México y su sucesor, Guillaume Couzy (37 años de edad), toma el timón con la mercadotecnia como su desarrollo profesional.
Peugeot 207 en septiembre.
La empresa vendió en 2006 un total de 16,068 unidades con meses difíciles al igual que transcurrieron para toda la mayoría de las marcas.
Uno, el primero, se despide habiendo implementado una campaña de ventas acerca de los 10 años de Peugeot en México e incrementando las ventas de su modelo 307.
Cerró los primeros seis meses con la venta de 7,584 unidades, un ascenso mínimo pero de avance: 0.1%.
Junio vendió 1,423 que, contra las 1,147 del año pasado, representan también un ligero crecimiento.
Sonriente, conviviendo con los medios mexicanos, reparte declaraciones a diestra y siniestra. El otro, con grandes ojos de sorpresa ante las preguntas agresivas de unos, la suavidad publirrelacionista de otros, dice que va a conocer primero a lo que se le ha enviado.
«He nacido en Francia y estudiado mercadotecnia que es la dirección que tuve en la filial en Brasil, pero esta no es mi primera vez en México ya que aquí diseñamos la estrategia de publicidad para toda América Latina y mi encuentro con esta gran capital ya fue atrás en el tiempo. Ahora me empaparé de lo que haya que aprender y les daré declaraciones más serias para dos o tres semanas adelante», sentencia el joven Guillaume Couzy.
Es la constante de Peugeot en México. Igual le pasó a Gilles Couffon, su primer director, cuya efímera pasada por la que fue su primera oficina, apenas le permitió un acercamiento con los medios.
Luego vino Stefano Casadio, el historiador cuya cultura le hacía rodearse de quienes gozábamos su conversación siempre a flor de piel.
Se despide Laurent Tasté y le decimos en el saludo que esta constante hasta cierto punto desconcierta la comunicación con él, con la empresa y lo que viene.
Pero nos presenta al nuevo ejecutivo.
— ¿Seguramente tu preparación con Peugeot Citroën en Brasil te permitirá preparar el terreno para la entrada de la marca hermana a México? — le arrojamos de lleno a Couzy.
— No, no es así. No seremos nosotros los que determinaremos cuándo viene Citroën a México.
Pero sabemos que él goza de esa experiencia para llevar a cabo el plan cuando así se lo señalen.
Rescatamos una declaración interesante de Tasté: «Estamos en un mercado donde sólo las empresas japonesas han registrado números positivos, pero también nosotros tenemos esa tendencia». En efecto, salvo Toyota, Honda y, en menor grado, Nissan, Peugeot ha sido la que en junio acumula un punto de avance en el mercado mexicano, no así la otra francesa Renault.
Los retos para el nuevo directivo son: Abrirse camino en un mercado muy competido y limitado (1.19 millones de unidades anuales con 37 marcas participando), hacerle frente a este con un portafolios donde faltan las camionetas SUV, crossover y pickups demandadas por la mayoría de los consumidores, pero enfrentando un buen producto como es el 206, el 207 que llegará en dos meses, y el 307 con planes más accesibles al público consumidor.
Otro lo es saber vender los productos europeos entre gente que no conoce la marca y que debe alejar de sí los primeros y difíciles años de la desconfianza por la falta de refacciones y los servicios limitados con reclamaciones, la gran constante de la mayoría de las marcas.