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La conferencia de prensa que dio Ruperto Stadler, presidente de Audi AG, esta semana que termina, dejó más preguntas que ya no tuvieron respuesta. La marca de los cuatro aros va a producir en México las crossover Q5 (rediseñada) y la nueva Q6 de nuevo cuño, afirma a Al Volante un ejecutivo ligado a la proveeduría.
Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, en la planta San José Chiapa (Foto Audi).
La buena noticia en Ingolsadt fue las inversiones no se detendrán. El proyecto es ambicioso porque Audi hará frente a la fuerte competencia que tiene en Estados Unidos contra BMW y Mercedes-Benz, dos marcas a las que no ha podido superar en ventas en el vecino país. La planta mexicana en San José Chiapa, para operar en 2017, les permitirá una mayor exportación hacia el mercado del TLCAN pero con un precio más competitivo. La fuente consultada por Al Volante en estos días, asegura que el plan de producción se tiene que anunciar a los proveedores con algunos años de anticipación para lograr el diseño y producción de los componentes que se piden. «Es un hecho que Audi nos ha pedido para 2017 las autopartes para su nuevo vehículo Q5 que será rediseñado y uno totalmente nuevo que sabemos será la Q6», añadió el entrevistado por la vía telefónica.
En cambio, en México Audi es líder del mercado Premium, dejando atrás en las ventas a BMW y a Mercedes-Benz, no obstante estas tienen a marcas satélites como Mini y Smart, respectivamente. Por tanto, la inversión le consolidará aún más en el pastel que le corresponde.
Otro factor que Audi debe cuidar es que las marcas generalistas están metiéndose al segmento Premium como es el caso de Mazda que tiene vehículos aspiracionales como el Mazda 6, o Nissan con su nuevo Maxima, además con Toyota que al nuevo Camry le ha inyectado más equipamiento con el fin de buscar a aquellos que tradicionalmente han adquirido marcas de alto nivel tecnológico.
La operación es biunívoca: Mini ahora incursionará en segmentos de población que han seguido al Mazda 3, por mencionar un ejemplo. Y Smart también pretenderá a consumidores que buscan un precio de 300 mil pesos para la adquisición de un nuevo vehículo pero que buscan eficiencia energética.
