Queríamos ver a Sergio Pérez en igualdad de condiciones que sus contrincantes y se nos hizo. Ya nada de conservar sus neumáticos y competir en desventaja. Ahora la estratega del equipo Sauber, la hindú Monisha Kaltenborn, lo mandó a la lucha desde la segunda vuelta del Gran Premio de Malasia cuando lo llamaron para sustituir sus neumáticos de lluvia intermedia (banda verde), por los de lluvia extrema (banda azul), acción que le valió colocarse en el tercer puesto, antes de que la carrera se detuviera en la novena vuelta, atrás de Hamilton y Button.
Sergio Pérez y Kamui Kobayashi (Foto Sauber).
Al reinicio de la competencia, y entre la vuelta 14 (Alonso) y la 15 (Pérez), de nuevo la necesidad de cambiar a neumáticos intermedios (banda verde). Sergio en segundo lugar, inicia una frenética persecución a Fernando Alonso cuyo Ferrari F2012 se torna más rápido gracias a la pista mojada mientras que Hamilton, Button, Webber y Vetel, paulatinamente pierden terreno.
Fernando Alonso acumula una ventaja de casi 8 segundos sobre Sergio Pérez, cuando la pista se empieza a secar y la situación se revierte dando ventaja al Sauber de nuestro connacional cuya esperanza al triunfo lo impulsa sobre Alonso.
De nuevo cambio de neumáticos, Fernando Alonso vuelta 40 decidiendo por los lisos medios (banda blanca), mientras que Sergio en la 41 cambia a los lisos duros (banda plata), recortando en pocas vueltas la ventaja del bicampeón español, el cual viendo evidente el rebase. saca el colmillo y se apropia de la trayectoria seca obligando a Sergio tomar riesgos en el rebase al usar las partes húmedas de la pista, estrategia que le da resultado sufriendo Sergio un despiste afortunadamente sin consecuencias pudiendo retornar a la intensa persecución de Alonso; sin embargo, la carrera finalizo antes de darle alcance.
El resultado para Sergio Pérez fue formidable y no sólo por el segundo lugar, sino por el aprendizaje al seguir por casi 40 vueltas al mejor piloto de la actual parrilla de la Fórmula Uno.
Para la vuelta 16 Fernando Alonso ya había olfateado el triunfo y manejó al límite durante las 40 vueltas restantes para lograrlo, y a Sergio Pérez también le mostró el camino y esa experiencia adquirida por Sergio ha sido invaluable para su desarrollo. Tal vez Sauber le mandó un mensaje al pedirle sólo el segundo lugar, pero Sergio mostró su madera sintiendo la posibilidad de ganar.
No importa, las lecciones aprendidas son una excelente forja para dar ese salto cuántico que necesitan los campeones. Felicidades.