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En una complicada competencia bajo lluvia pertinaz, y donde el auto de seguridad inició la carrera al frente con 19 vueltas al circuito de Fuji, Lewis Hamilton del equipo McLaren-Mercedes se hizo con facilidad en las últimas vueltas del Gran Premio de Japón de la Fórmula Uno.
Lewis Hamilton comparte con Heikki y Kimi.
Hamilton sufrió un revés de consideración al perder las primeras tres posiciones cuando entró a un largo aprovisionamiento a pits y, luego de mantener una paciencia requerida por las adversas condiciones del asfalto, supo esperar para irse a la punta en la vuelta 34, luego perderla y recuperarla para de allí ganar con una ventaja de hasta 19 segundos contra el segundo lugar que resultó ser el finlandés Heikki Kovalainen que le dio a Renault su primer podio.
Fernando Alonso, quien arrancó segundo, sufrió un fuerte accidente sin consideraciones para el español en la vuelta 42, con el auto destrozado, con lo que abrió la posibilidad de que Lewis Hamilton se corone en el Gran Premio de China que se corre este domingo, ya que el inglés avanzó con 107 puntos a esta probabilidad.
Felipe Massa, del equipo Ferrari, tuvo una serie de trompos desde que el auto de seguridad inició la carrera con sus torretas encendidas, por lo que tuvo que entrar el brasileño a fosos a cambiar llantas para lluvia extrema. Con todo y las desavenencias, el corredor de puso en sexto lugar, siendo sancionado por rebasar con una bandera amarilla.
La falla de la escuadra roja italiana también fue cometida para con Kimi Raikkonen que tuvo que entrar por cambio de neumáticos y ambos, Massa y Kimi quedar prácticamente hasta los lugares 20 y 21, en ese orden aún con el auto de seguridad en pista.
La presencia del auto de seguridad se volvió eterna porque los comisarios de la F-1 no tomaban a tiempo una decisión: Haberla arrancado desde el principio con lluvia o cancelar la carrera. Optaron por el medio: Dejar el auto insignia por 19 vueltas y luego apagar sus luces y salir de la pista para permitir la carrera esperada por millones en el mundo.
La táctica de Alonso fue buena pues salió desde el principio con llantas de lluvia extrema y le resultó pero con una ventaja no aprovechada a fondo por el español, ya que en la 42 acuaplaneó su auto y perdió control pegando con la parte trasera y dañando severamente el coche que quedó fuera. Alonso miraba al coche y no lo podía creer que había impactado de esa manera. Se recuperaba a un lado de la pista apoyado por un oficial que le preguntaba si se sentía bien.
La lluvia seguía para la vuelta 19 así que de nada sirvió la presencia del auto de seguridad pues la pista se seguía mojando. Fue hasta el principio de carrera donde los autos, con una mayor velocidad, comenzaron a limpiar un trazado del circuito que fue más o menos un alivio gradual para ellos.
Wurz se accidenta poco después que sale el auto de seguridad.
Hamilton y Alonso marcan la pauta hasta la vuelta 26 cuando el español entra a pits. Una vuelta después, en la 27, lo hará Hamilton.
Sebastián Vettel de Toro Rosso se hace de la punta mientras Raikkonen ya avanza en 18 y Massa en la 18.
Para la sección entre las vueltas 30 y 40 Alonso se mete en una zona complicada con Sebastián Vettel y sale afectado, quedando hasta la octava posición.
En la 37 entra a pits Vettel por lo que se va hasta la novena posición y el nuevo líder es Mark Webber del equipo Red Bull.
Hamilton ya se había colocado nuevamente en los primeros sitios, en el segundo, seguido de Robert Kubica mientras Felipe Massa viene en el lugar 15 vícitima de pequeños despistes. Nick Heifeld está en séptimo aprovechando los contínuos despistes de otros competidores.
Mark Webber, Heikki Kovelainen, Robert Kubica y Lewis Hamilton son el pelotón que le dan vida a los nuevos protagonistas de la Fórmula Uno como hace tiempo no se veía.
Los clásicos corredores, que aunque no son novatos tenía tiempo no se hacían de la punta de una carrera de Fórmula Uno, se hacen del contingente maestro en Fuji, donde la lluvia demuestra que estos desapercibidos para la mercadotecnia tienen mejor manejo en estas circunstancias.
Por lo menos durante algunas vueltas.
Kovalainen lidera para la vuelta 38 pero aparece Giancarlo Fisichella, uno de los más veteranos en la F-1. La lluvia sigue, por lo que no hay planes de cambiar llantas para los equipos.
Vuelta 41 Fisichella es el líder con Hamilton tras de él. Esta paciencia del inglés le permitió hacerse de lal punta cuando Giancarlo tiene que entrar a fosos a repostar.
Para la vuelta 45 aparece de nuevo el auto de seguridad cuando Webber se quedaba fuera.
Hamilton se va a hacer de la punta para no perderla ya más hasta recibir la bandera a cuadros que lo convierte en casi campeón de la F-1, siendo el más joven que podría coronarse en China el domingo
Kovalainen recibe la presión de un Kimi Raikkonen, los dos compatriotas, que va en tercero, pero sin ceder ni al final.
Vuelta 50 Hamilton, Kovalainen y Raikkonen. Un Fisichella que ya se hace de la sexta posición y un Massa que viene presionando luego de una mala racha desde el comienzo de la carrera.
Abandono de un Ralph Schumacher, aquel jovencito que cifraba su futuro en la espalda de su hermano Michael cuando corrían juntos en los go-karts. Ahora sin la compañía de aquel, pero recibiendo los consejos de Schumi. Sólo que a Ralph, como buen hermano menor, nunca le ha gustado recibir órdenes del mayor.
Davidson también abandona con una Super Auguri decepcionada.
Lewis Hamilton cierra el crono en 2 horas 34 minutos y 759 milésimas, y escribe una nueva página de la Fórmula Uno con el piloto más joven conquistando en su debut casi un campeonato.
Lo veremos en China.
