Cientos de kilos de material reciclable y reciclado, agua tratada industrialmente que llena un lago artificial con 5,000 peces, 2,000 árboles que se plantan y se donan a familias hidrocálidas enteras. $4,500 millones de dólares moviéndose por la ecología ¿Es la Secretaría del Medio Ambiente? No, son las instalaciones de la planta industrial de Nissan Mexicana en el estado de Aguascalientes.
El Programa Nissan Verde, implementado por Nissan Mexicana desde hace varios años, sigue desarrollando sus objetivos. El principal es que para el año entrante 2010 sus plantas industriales de Aguascalientes y Morelos hayan disminuido en 7% la emisión de miles de toneladas de monóxido de carbono (CO2) a la atmósfera.
Armando Ávila, vicepresidente de manufactura de Nissan Mexicana; David Aldana, director de la planta de vehículos de Nissan en Aguascalientes; Marco Rivera, gerente para el medio ambiente de la firma automotriz y Diego Arrazola, director de comunicación corporativa, reciben a 15 periodistas en la planta de la capital hidrocálida.
Muestran el vivero donde se han sembrado 2,000 árboles que son compatibles con el entorno ecológico de la zona, evitando que se sequen. Le dan seguimiento a la donación de arbolitos a familias enteras que llegan semana a semana a la planta de Aguascalientes por ellos. Se trata de evitar que mueran.
Toca a los periodistas sembrar su propio arbolito en las instalaciones de la planta. Y ver cómo se ha mantenido un lago artificial que contiene hasta 5,000 peces. Son las aguas tratadas que ya no se aprovechan en las naves industriales. ¿Cómo pueden los peces sobrevivir? «Es la mejor forma de demostrar que el agua tratada cumple con todas las especificaciones ambientales para ser reutilizada en riego, en esta fosa donde nadan los peces, en fin», dice Marco Rivera a alvolante.info.
Pedro Francisco Carbajal, otro de los mexicanos que orgullosamente toman asiento junto con los ejecutivos japoneses de Nissan en las tareas de alta dirección, nos explica que se ha mejorado la etapa de reciclado de partes. «Si nosotros pudiéramos reciclar cada vez más piezas o sobrantes del proceso de producción de nuestros vehículos, no tendríamos un banco con esas piezas. Se trata precisamente que, la próxima vez que vengan, ya no exista nada sobrante, todo se haya reutilizado».
Es la parte final externa de una de las naves de estampado. Allí no hay un basurero. Sino un espacio donde se trabaja en reutilizar componentes. Por ejemplo, el plástico que queda –las rebabas– de la planta de estampados de plástico, se transforma en plataformas de plástico duro, semejando a las tarimas que antes eran de madera. Este sobrante vuelve a tener una vida útil dentro de la misma planta. O por ejemplo se envía este material a una fábrica de marcos para cuadros: Son de plástico aunque asemejan madera. Y una más: un juego de dominó elaborado por DICSA (Despercidios Industriales de Cuernavaca) así como bolsas de plástico, hechos con materiales reutilizables. La última: los botes de aerosol son «exprimidos» en su contenido para el material residual enviarse a plantas industriales específicas y no tirarse ni a la basura ni en el caño. Parte de la cultura de la reutilización en Nissan.
Uno de los trabajos ecológicos más difíciles de conseguir por la planta productiva que trabaja en México es la eliminación o control del CO2. Nissan, dice Marco Rivera, ha disminuido en 550 partes por millón de CO2 en sus vehículos. «Hablamos que parar el 2050 deberemos reducir en 70% estos gases en nuestros autos y camiones».
Para ello la firma japonesa a nivel internacional está produciendo vehículos cero emisiones como el LEAF, híbridos como el Altima y X-Trail que se comercializan en los Estados Unidos y Japón y también trabaja en los biocombustibles como energético alternativo al uso de la gasolina sin etanol.
«Estamos produciendo transmisiones más ligeras en peso y en operación mecánica como la CVT que ahorran al consumo de combustible; tenemos planes con diversos gobiernos para introducir en los próximos años vehículos de cero emisiones como es el caso de Estados Unidos donde en algunas regiones específicas se están instalando ya estaciones de carga de energía eléctrica para este tipo de unidades», señala el ejecutivo en la rueda de prensa.
Y remata: «Para el 2010 tenemos el objetivo de reducir en 7% todo el bióxido de carbono emitido por nuestras plantas industriales tanto en CIVAC Morelos, como aquí en Aguascalientes».
Como dato curioso: Solamente las plantas de Nissan en Japón superan a cualquier otra planta industrial de la firma en el mundo como líderes en el control del CO2 en sus naves contaminadoras. México, tiene el segundo lugar con la eliminación del 95% de esos gases (la actual medición es de .23 toneladas de CO2 por cada vehículo producido).
Para terminar nuestro recorrido, después de sembrar personalmente y sin ayuda alguna el arbolito que nos corresponde, preguntamos sobre lo que representaría «ahorrar» en la reutilización de los materiales. «Aunque no es un beneficio que obtengamos ni directa ni indirectamente, ello representaría unos $5 millones de dólares», dice Marco Rivera. «El 99% de los componetes desechados en cada auto, se reutilizan».