En EU se han tomado medidas urgentes contra la crisis; aquí no

«Los proveedores de la industria mexicana de autopartes están conscientes que tienen que abastecer componentes para un número mucho menor de unidades que se están produciendo este año en Estados Unidos», dice Agustín Ríos, presidente de la Industria Nacional de Autopartes, INA. Reconoce que en el vecino país se han tomado medidas urgentes para apoyar a su industria mientras aquí en México no ha sido así.

Entrevistado en un programa radiofónico especializado en negocios, Ríos Matence dijo hoy que los paros técnicos en las plantas armadoras tanto en Estados Unidos como en México, están obligando a que las empresas de autopates también realicen el congelamiento de actividades, pero se han visto obligadas también a reducir jornadas de trabajo de sus obreros, pero inclusive a despedir a parte de su personal por la baja demanda de automóviles en los diferentes mercados. Hasta el momento se han despedido a 16,000 empleados del sector autopartista, dijo.

Desde el inicio de enero muchas armadoras están paradas en Estados Unidos y algunas en México. Volkswagen ha anunciado un primer paro del año para la semana entrante. Por ello, las empresas de autopartes están dejando de surtirle piezas por esos paros. No quieren tener ese número de componentes parados, no tiene sentido.

Sobre el acuerdo por la defensa de la economía y el empleo dijo que toda ayuda es benéfica. «Las autoridades están terminando de pulir ese programa para ver qué empresas se pueden ver beneficiadas», dijo, pero hay que reconcoer que la crisis nos ha rebasado. En Estados Unidos se tomaron medidas urgentes para corregir el problema en el sector automotriz, pero parece que aquí no.

Existen 1,100 empresas de autopartes en México. Se producen 29,000 millones de dólares al año (dato de 2008) y el 70% de componentes se exportan y un 30% se destinan al mercado doméstico.

Trabajan en ese sector 450,000 personas con empleo directo (más que en todas las armadoras presentes en territorio nacional), surten a los fabricantes nacionales de automóviles como a los extranjeros, pero también cubren la demanda del parque vehicular compuesto por 26 millones de unidades en todo el país.