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La filial de la alemana de autopartes Robert Bosch concretará este mes, o a más tardar en septiembre, la adquisición de la planta de Delphi Corporation ubicada en el municipio de Saltillo, capital del estado mexicano de Coahuila.
Es en esta entidad donde se localizan las armadoras General Motors y Chrysler y a donde acuden empresas de autopartes a instalarse en un corredor de desarrollo reciente en Derramadero.
Derramadero es el valle donde se está construyendo la nueva planta de motores y transmisiones de Chrysler con una inversión de $580 millones de dólares.
Bosch informó que esta adquisición, más el acondicionamiento de sus otras plantas ubicadas en Toluca, estado de México, le hará derogar $90 millones de dólares.
El nuevo parque industrial de Toluca donde Chrysler invierte $1,000 millones de dólares adicionales para acondicionar su planta al nuevo modelo crossover que se iniciará en próximas semanas, se encuentra a 70 kilómetros al norponiente de la capital mexicana.
La planta de Chrysler produce el modelo PT Cruiser tanto para el mercado local como la exportación, pero esta unidad esta por llegar a su fin para dar paso a otro modelo de caracter familiar.
Robert Bosch es la empresa de autopartes más grande del mundo y en México tiene una dinámica presencia en el sector de componentes y equipos domésticos, según se desprende de informaciones de prensa de la propia firma autopartista.
Charles Visconti, director general de Robert Bosch México, informó que el acondicionamiento en sus 10 plantas en la república mexicana le permitirá abastecer al sector automotriz terminal en sus futuros proyectos.
Uno de ellos es el de Chrysler con sus nuevos motores generación 2008, transmisiones más eficientes en la nueva planta en Derramadero, Coahuila.
Bosch en México ha reducido tremendamente la adquisición, a su vez, de componentes para sus equipos electrónicos integrados que venían de Europa, por ejemplo, lo que representará un 90% de mayor integración local en el área del Tratado de Libre Comercio con América del Norte.
Con estas adecuaciones, Bosch dará empleo a 1,000 nuevos trabajadores en México.
La planta de frenos que Bosch tiene cerca de Nissan en Aguascalientes, le permitirá seguir abasteciendo a esta armadora con sus nuevos proyectos automotrices en 2009.
Los componentes electrónicos producidos en la ciudad fronteriza norte de Juárez, le aseguran a la empresa alemana cumplir con sus cuotas de exportación a las principales marcas en Estados Unidos, además de surtir a las naves industriales ubicadas en esa estratégica zona del país.
Los mecanismos para freno que actualmente produce Delphi en Saltillo, serán ahora producidos por Bosch luego de los planes de adquisición de esa nave industrial que para la firma germana representa una estrategia en sus operaciones en esa área de influencia, punto neurálgico de las operaciones en América del Norte.
