Por Gisela Zapata
En esta ciudad en la que a veces parece que ya nada nos sorprende, captó mi atención un Morris Mini Cooper, original, bellísimo y pequeñito, como el de Mr. Beans, (para quien le guste este comediante inglés) y por supuesto, su conductor ocupaba el asiento del lado derecho. Me imaginé que debía ser complicado manejarlo así… o tal vez no…
Morris, ¿por qué el volante a la derecha? (Foto archivo).
La explicación más lógica que encontré se remonta a algunos siglos, en los que los carruajes se volvieron el medio urbano de transporte. Los cocheros en la Europa de antaño, requerían utilizar la mano izquierda para sostener las riendas de los caballos y la derecha para chasquear el látigo, si circulaban por la derecha, el movimiento de retroceso del látigo llegaba a lastimar a los peatones que circulaban al lado del coche, por lo que se decidió en todo el continente que se manejara por la izquierda.
Al llegar la movilidad motora y el látigo ya no fue necesario, se decidió circular del lado derecho con el conductor del lado izquierdo para utilizar la mano derecha y hacer los cambios, obviamente los zurdos , tuvieron que desarrollar su destreza en la mano derecha como en muchas otras cosas a las que se han visto obligados a habilitarse.
Toda Europa regreso a circular por la derecha… menos la Gran Bretaña, que se mantuvo con esa tradición.
Existen otras versiones curiosas al respecto que les compar
Se dice que en la época romana, los carros circulaban por la izquierda en las calzadas del imperio, costumbre que perduraría durante toda la Edad Media. La explicación que se ha dado es que, como la mayoría somos diestros y en aquella época era habitual ir armando, la gente prefería dejar pasar al que venía de frente por su derecha, por si fuera necesario hacer uso de la espada.
“En el siglo XVIII dos factores, uno económico y otro político, contribuyeron decisivamente al cambio. Por un lado, el de la proliferación de grandes carruajes para el transporte de mercaderías tirados por parejas de caballos en los Estados Unidos y en Francia.
Como estos carruajes no disponían de asiento para el conductor, éste montaba en el último caballo situado a la izquierda, mientras la mano derecha le quedaba libre para el látigo que le permitía azotar al conjunto de caballos.
Colocado así era normal querer ver a los vehículos que venían de cara circulando por la izquierda. Por otra parte, el hecho de que en la Revolución Francesa acabara con la costumbre de circular por la izquierda, una deferencia reservada hasta entonces a la aristocracia.
Las invasiones napoleónicas extendieron esta norma a los países ocupados, norma que no fue aceptada por los países que resistieron a esta expansión, como el imperio Austrohúgaro, Gran Bretaña y Portugal.”
“En 1835 se estableció la obligación de circular por la izquierda en todo el Imperio Británico – excepto Egipto, país conquistado anteriormente por Napoleón -, a pesar de que el resto de países de Europa y América se inclinaban progresivamente por la conducción por la derecha.
Este cambio comportó situaciones curiosas, como por ejemplo que en la Columbia británica y otros territorios anglófonos de Canadá se circulara por la izquierda hasta la Segunda Guerra Mundial, mientras que en Québec se circulaba por la derecha.”
Una versión más dice que por ser conquistada por Napoleón -que era zurdo- y para poder defenderse con su mano izquierda mandó una orden en la cual ponía que todos los países conquistados por él se debía circular por la derecha; como Inglaterra no fue conquistada por Napoleón siguió circulando por la izquierda como era ya costumbre.
Siempre recuerde al manejar, ya sea por la izquierda o por la derecha, que alguien nos espera en casa.