Octavio Roy Ocotla Rivera

Destacado periodista del mundo deportivo y automovilístico en México con más de 34 años de carrera profesional en la industria automotriz y las carreras de autos en el país.

Nació el 25 de abril de 1921 en la ciudad de Jalapa, Veracruz, y murió en la Ciudad de México el 26 de mayo de 1977.

Octavio Roy Ocotla Rivera vivió sus primeros años en Jalapa y posteriormente, huerfano, se trasladó a la Ciudad de México donde fue protegido por su tía María Rivera.

Desde joven mostró inclinaciones por el periodismo y la locución. Se inició como reportero en la revista «México al Día», una destacada publicación dedicada a la familia. Allí comenzó con notas de interés general como la industria aeroespacial.

Locutor desde los 19 años, llamado «El Chamaco de ORO» se convirtió en uno de los anunciadores de las tandas musicales en Xochimilco junto a quien sería su más entrañable amigo, Francisco Neri Cano, la voz oficial de los salones de baile California Dancing Club.

Inició en el periodismo automotor en el periódico «Auto-Noticias», a cargo de Gabriel Villagrán, familia poco vinculada a la actividad periodística pero más a los negocios en general. Octavio fue quien dio forma a un verdadero periodismo especializado.

Más tarde, uno de sus primeros hijos, Rogelio, seguiría sus pasos en esa misma publicación, «Auto-Noticias» como jefe de redacción y editor de la primera de primera, con un alto sentido sociológico.

Octavio incursionó en el radio con su programa «Romancero del Aire» en la XEJP (tiempo después Radio Variedades).

Eran los tiempos en que el locutor era quien ponía su propia música. Así que Octavio se hacía acompañar con discos de acetato de 78 revoluciones por minuto con temas como «Polvo de Estrellas» y las grandes orquestas de Al Goodman, Glenn Miller, etc.

Fue en esas jornadas de la poesía por radio que tuvo una gran radioescucha, Yolanda Gutiérrez, a quien conoció tiempo después en una fiesta. Juntos bailaron «A través de los Años» y ese amor perduraría hasta 1977 cuando fallece.

Octavio Roy Ocotla, llamado en el argot radiofónico «El Chamaco de ORO (por las siglas de su nombre), fue uno de los fundadores de Radio 13 (XEDA), como lo establece el acta constitutiva de esa estación, siendo él quien puso el nombre a la estación donde trabajó por un tiempo.

Después participó en el mundo del automovilismo junto con el locutor Jorge Labardini en la creación de «Radio Volante», club automovilístico que reunió a pilotos y periodistas. Poco después nació el «Club Roda» del cual también fue socio.

Comenzó a escribir entonces en los periódicos «La Prensa» y «Excélsior», primero sobre materia boxística donde se le conocía con el apelativo de «Shaca Shangue», como miembro de la Asociación de Cronistas Deportivos de México.

En los años 50 se dedica al cien por ciento al periodismo deportivo sobre carreras de autos, siendo uno de los principales cronistas de la original Carrera Panamericana dentro de sus cinco versiones de 1950 a 1954, tripulando uno de los autos insignia y de seguridad para narrar las carreras para XEW vía telefónica desde cualquier poste del cable telefónico que existiera dentro de la ruta de la competencia.

Laboró también en periódicos como «Novedades» y «El Universal» siendo figura destacada del periodismo sobre autos.

En 1965 incursiona como reportero en el primer periódico a color del país, El Heraldo de México, a través de una página dominical sobre automovilismo deportivo con la sección «Motor H». Periodista obligado para las referencias deportivas, Octavio fue el gran entrevistador de figuras como Moisés Solana, los nacientes hermanos Ricardo y Pedro Rodríguez de la Vega, hasta los ídolos que vinieron a México al Gran Premio desde la inauguración del autódromo de la Magdalena Mixhuca, como Jim Clark, Graham Hill y Jackie Stewart.

Pero también conoció a grandes figuras del automovilismo nacional como Billy Sprowls, Freddy Van Beuren señor, Alberto Rojas, Juan Carlos Bolaños, Guillermo Echeverría, Roberto Arnstein, Salvador Checa y muchas más.

Octavio tuvo una importante faceta musical. Creó un trío llamado «Trío México» donde era barítono y compositor de más de 10 canciones. Poeta creador del poema a la Guadalupana, premiado en 1948, autor de varios poemas bien dominados en la actualidad por su hijo Rogelio.

Las canciones las interpreta hoy en día su hijo César, quien sacó la madera en la guitarra de Octavio.

En los años 70 incursiona en el periodismo de análisis a través de una famosa columna «Comentarios desde Jauja» con un humor blanco y una ironía que ponía a veces en tela de juicio la función pública, caracterizado siempre por su profundo nacionalismo y su siempre firme amor a México.

Participó en revistas políticas como «Iniciativa» de Mario Huacuja, «Iniciativa Popular», «Ser» y algunas novelas cortas en la revista familiar «Vanidades».

Fue figura respetable en el mundo del automovilismo deportivo y motivo de homenajes por parte del gremio periodístico, celebrándose incluso carreras en su honor.

En los años 70 incursiona en las relaciones públicas en la empresa de automóviles Ford Motor Company como jefe de prensa.

Instauró en 1973 los primeros préstamos de autos para prueba para los periodistas. Hizo participar a la prensa especializada activamente en la inauguración de escuelas Ford en todo el país.

Su obra literaria inconclusa fue «Mi materia y yo» y una inmensidad de colaboraciones para periódicos, revistas y programas de radio y TV en el país.

Falleció el 26 de mayo de 1977 en un accidente automovilístico.