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Concluidas las negociaciones de 26 mesas del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) en Atlanta, Georgia, el equipo mexicano encabezado por Ildefonso Guajardo, titular de la Secretaría de Economía, aceptó en materia automotriz que México reduzca el contenido regional de los vehículos al 45%, al traste de lo alcanzado en 1994 con el TLCAN (62%); también que vengan más camiones ligeros de Japón, con quien se tenía un acuerdo diferente y que EEUU pueda tener acceso al mercado de autopartes de Asia, compitiendo contra las mexicanas.
Riesgo que TLCAN sea rebasado por TPP (Foto archivo).
Conformado por 12 países, el Acuerdo de Asociación Transpacífico es un tratado comercial extra-continental entre el área de América (Canadá, Estados Unidos, México, Chile y Perú) y los países de Asia y Oceanía (Singapur, Malasia, Nueva Zelanda, Vietnam, Brunéi, Japón y Australia).
Resultado del APEC, Acuerdo del Pacífico, el TPP fue creado, entre otras cosas, para contar con un arbitraje de diferencias de los inversionistas con los Estados. En 2005 el TPP1 estuvo conformado por Brunéi, Chile. Nueva Zelanda y Singapur. El Acuerdo P4 entre cuatro países invitó a Estados Unidos a unirse. Fue cuando este país jugó un papel fundamental en el TPP2 actual para alinear a varios países amigos y hacer frente al fuerte comercio que China representa en el área.
Las negociaciones de México
El secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, viajó a Atlanta, sede de las reuniones de TPP2, a fin de analizar en las 26 mesas los aspectos de agricultura, lácteos, automotriz y farmacéuticos (EEUU pide que se eliminen los genéricos en los países firmantes a favor de las trasnacionales de su país), entre otros. En el sector automotriz, el titular de Economía pugnó porque las reglas de origen fueran del 45% pero la presión de las pequeñas naciones asiáticas como Malasia y Singapur, empujaron a que bajara aún más porque ellos venden volumen y no contenido –lo que da al traste a lo alcanzado por México en el TLCAN con Canadá y Estados Unidos con el 62%–, finalmente quedando en el 45%. Con todo, Estados Unidos podrá adquirir más componentes asiáticos a menor precio de los que se fabrican en México, con lo que, en su aplicación el TPP, en dos años, seguramente disminuirá la compra de componentes hechos en México hacia Estados Unidos, lo que afectará las exportaciones mexicanas que lo colocaban en el primer país en abastecer componentes a la industria del vecino del norte.
Guajardo en las negociaciones de Atlanta (Foto SE).
Algunos analistas en México ya se preguntan: ¿Qué mercancías va a enviar México a esos 11 países con empresas nacionales que enfrentan la crisis económica interna y con una reforma fiscal que les ha afectado en sus operaciones en los últimos años?
Las mismas fuentes indican que por primera vez México está obteniendo más ingresos vía las manufacturas que por el petróleo, lo que representa que se debe defender la planta productiva de autos, por ejemplo, sobre todo, y la de autopartes. Aceptan que si bien el país tuvo que bajar las reglas de origen que hablan del contenido local de partes en cada vehículo, del TLCAN al TPP, al 50%, debiera obtener otras ventajas, pues ahora Japón tendrá bandera verde para traer a la zona camiones ligeros sin desgravación
La lista de aranceles irá disminuyendo gradualmente hasta un libre comercio entre las 12 naciones.
El Acuerdo de Asociación Transpacífico se firmará en 2016 pero operará en 2018. Esta integración comercial representa el 40% del Producto Interno Bruto de todo el mundo. Y representa el 25% de las exportaciones e importaciones globales. Estados Unidos tendrá que esperar a que el Congreso de su país analice los acuerdos del TPP entre enero y marzo de 2016. Ya circulan en la nación vecina noticias de que el Congreso no va a autorizar el TPP porque va en contra de los empleos. Por tanto, si en dos años no se logra la firma del acuerdo comercial, sólo lo podrán validar seis naciones siempre y cuando representen el 85% del PIB de los 12 firmantes, lo que es imposible. Japón y Estados Unidos tienen el control de ese TPP, haciendo frente al gigante chino.
Lo que queda por analizar será la repercusión del TPP sobre los conceptos del TLCAN, que pudiera representar una regresión para México, pues los lineamientos con Estados Unidos pudieran variar con la aplicación del Acuerdo Transpacífico.
Consumidores de algunos de los países comprometidos con el TPP están llevando a cabo un movimiento regional llamado TPP Abierto, donde se están oponiendo enfáticamente porque habrá afectaciones para los habitantes, para el empleo regional y para la eliminación de algunos alcances (como las medicinas genéricas de menor precio) ya logrados.
Si el TLCAN le permitió a México evitar la competencia de la Unión Europea y Japón, con el TPP Japón podrá salirse con la suya, esto es promover sus productos con mayor agilidad en Estados Unidos, donde México tenía preferencia, como por ejemplo en autopartes.
