Inicia, ahora sí en serio, la producción de Ford Fiesta en México

Después de algunos problemas de producción, por fin inició hoy en la planta Ford de Cuautitlán, México, el ensamble del nuevo Fiesta. A mediados de mayo el mexicano Eduardo Serrano, presidente y director general, dará el banderazo de salida junto con Felipe Calderón y Alan Mulally. Inicia así una nueva etapa del consorcio tanto en México como en una planta que hacía meses estaba casi destinada al olvido y desaparición.

El nuevo Ford Fiesta ya está en los patios de Cuautitlán (Foto forista de alvolante.info).

La producción del nuevo Ford Fiesta en la planta mexicana de Cuautitlán, a 30 kilómetros al noroeste de la capital azteca, se había atrasado un poco debido a algunos problemas para el ensamble. Ford decidió dar de baja a los 800 operadores que tenía hace un año y la nueva contratación, según reporta uno de sus trabajadores entrevistados por alvolante.info, fue en su mayoría de jóvenes que con título y todo, no tenían la experiencia que la base obrera anterior podía presumir.

Ese problema de ajuste de los nuevos operadores jóvenes al campo laboral de la práctica, atrasó que los mecanismos de ensamble con cero defectos, pudieran llevarse a cabo de manera normal. El atraso trajo como resultado que hasta el día de hoy se iniciará formalmente la producción de los Fiesta en la planta de Cuautitlán.

Refiere la misma fuente, en exclusiva, que los nuevos y jóvenes trabajadores ya no trabajan bajo el esquema tradicional de contratación directa entre Ford y su sindicato, sino que se hace a través del sistema norteamericano outsourcing donde un tercer contratador es quien fija las nuevas reglas del juego laboral en donde los temas como antigüedad, pensiones, jubilaciones, etc. pasaron ya a mejor vida. Los contratos ahora son por tiempo limitado y constantemente los nuevos obreros bajo la directriz del secretario del Trabajo, Javier Lozano, tienen que firmar un nuevo contrato. Así están operando la mayoría de trabajadores de la industria automotriz, bajo la política antisindical de Felipe Calderón, quien será el que dé el banderazo de salida, junto con el presidente mundial de Ford, Alan Mulally, a mediados de mayo próximo.

En el corralito, listos para salir a la venta (Foto forista de alvolante.info).

–¿Y entonces de dónde salieron los que ya circulan en la calle?

— Se tienen algunos prototipos tanto de China como de Alemania. De hecho se pidieron varios autos a Alemania para las pruebas. Estos vehículos fueron homologados a las normas que tienen que cumplir en Norteamérica. La semana pasada se llevó a cabo en Estados Unidos la prueba de manejo para la prensa de ese país (alvolante.info se enteró que también se llevaron a varios periodistas mexicanos a esa evaluación). La conducción de este test fue con autos hechos en Alemania, no en México, por los problemas que tuvimos para iniciar la producción local.

Ridículo es también que las pruebas de un auto hecho en México se realicen primero en Estados Unidos. Claro, se entiende que allá hay más prensa, más impactos publicitarios por tanto comercialismo que hay en los medios, pero por derecho de orígen debió tocarle a la prensa mexicana antes esta evaluación, al producirse aquí esta unidad. Pero ese es otro tema.

Pasado el atorón que se tuvo para la producción en Cuautitlán –para lo cual se tuvieron que llamar otra vez a los trabajadores con experiencia que ya habían sido despedidos–, hoy formalmente, dice la fuente de alvolante.info, se ha iniciado la producción en serie del nuevo Fiesta.

Ahora, Ford Motor Company de México se prepara para presentarlo a mediados de mayo con la presencia del presidente y director general de la firma en el país, el también mexicano Eduardo Serrano, Felipe Calderón y el presidente mundial de Ford, Alan Mulally.

Ya le hicieron las pruebas en la calle, cerca de Cuautitlán (Foto forista de alvolante.info).

Esta producción de unidades es un hito para la industria automotriz de México. Cuautitlán, que abrió operaciones en 1964 siendo la empresa más importante de América Latina en su momento, tuvo un ciclo de 10 años de franco estancamiento. Se dejó de producir el modelo Ikon y las pickups F-150 y el año 2009 cerró operaciones para adecuar la planta a la nueva producción del Fiesta.

Iniciará con la producción anual de 150,000 unidades pero, a toda velocidad, deberá alcanzar las 350,000 lo que le permitirá a Ford México un récord en sus exportaciones.

La operación es muy importante para México y para Ford en el Continente Americano, ya que desde aquí se surtirán los Fiestas de nueva generación para toda el área.

El Fiesta brasileño que todavía se vende en México, paulatinamente podría irse quedando atrás hasta descontinuarse.

«Una lavadita, joven» (Foto forista de alvolante.info).

Mientras, la producción del viejo Fiesta en Sudamérica continuará y para darle una pequeña re-estilizada al modelo anterior, los ingenieros han trabajado en la parte frontal para «modernizarlo» un poco y hacerlo parece a algo que asemeje «un nuevo Fiesta».

Así ha quedado el «nuevo» Ford Fiesta sudamericano (Foto archivo).

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