Impulso a motores diesel de Daimler-Renault-Nissan en México

Desde que a mediados de este año se anunció en Europa el proyecto conjunto de Daimler con la alianza Renault-Nissan para unir esfuerzos en la fabricación de automóviles y motores, una de las etapas que más llama la atención para México es el ensamble de motores a diesel, plan que se estará llevando a cabo en Aguascalientes en la tercera etapa del complejo industrial que allí se construye.

Cuando William Krueger, vicepresidente de Nissan Américas, anunció la inversión de $2,000 millones de dólares para Nissan Mexicana en Aguascalientes, en la construcción de una segunda planta que será mayor a la actual que inició operaciones en 1992, dijo que habría la producción en el nuevo complejo de un auto de la plataforma B.

Hoy en día Al Volante ha revelado en este mismo espacio que dicha unidad será el monovolumen subcompacto Note que ya se fabrica en Japón y cuya nueva generación se producirá en Aguascalientes II. Este vehículo, indagábamos, tendrá un «bajo precio». Y si no es de 120 mil pesos como calculamos, sí lo sería menor a $135 mil. ¿Sustituto del Tsuru?

Una importadora japonesa de autos, competencia de Nissan, incluso ha tenido el modelo de Nissan, Note, en sus instalaciones para analizar el producto y prever el impacto que le ocasionará a sus propios productos.

Sin embargo, en su reciente visita a México (la tercera en los últimos cinco años) Carlos Ghosn, presidente de la alianza Renault-Nissan, no quiso hablar sobre la producción de autos de lujo Infiniti con el apoyo de Daimler de Alemania.

Esta semana, el periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung afirmó que Mercedes-Benz fabricará un auto en conjunción con las marcas Nissan-Infiniti en México.

En Detroit, en enero pasado, Ghosn dejó entrever que habría sorpresas en América del Norte, antes del anunció de la inversión en México. Hace menos de un mes, en su visita nuevamente a Estados Unidos, el máximo ejecutivo dejó entrever que habría un juego interesante para el país vecino, ante lo cual la prensa estadunidense se incomodó. Incluso Automotive News difudió un comentario no muy agradable sobre por qué se llevaban las inversiones a México y no se quedaban en Estados Unidos.

Aunque Al Volante por primera vez no fue invitado a una charla con Ghosn, hizo su labor. Investigó lo que Ghosn había declarado en EEUU y en México. Entre líneas el presidente de Renault-Nissan confirmó lo dicho en Estados Unidos: Habría juego para México (pero no aclaró que sería con la producción de autos Infiniti).

Volviendo a lo publicado por la prensa alemana, un ejecutivo de Daimler, no identificado, dijo al periódico citado que Mercedes y Nissan construirán una planta para producir vehículos conjuntamente (la marca Mercedes y la marca Infiniti, subraya Al Volante, o la plataforma y tren motriz de uno, para la otra). «La decisión final aún no se ha tomado», le dijeron al reportero alemán.

Cuando Al Volante echó un vistazo al terreno donde se contruye Aguascalientes II (así se conoce al nuevo complejo dentro de Nissan), se encontró con un enorme «hoyo» de varias hectáreas. Entonces, indagando con la secretaría de Desarrollo Económico local, un funcionario nos dijo que se edificaría también un complejo para Mercedes-Benz (aquí lo difundimos en su momento). Esa será la famosa «segunda etapa» de la que Nissan Mexicana se había negado hablar. Y cuya edificación podrá ser entre 2014 y 2015.

Esta semana, fuentes allegadas a la alianza Renault-Nissan en México, han declarado a Al Volante que «lo que se fabricará en la segunda parte de Aguascalientes II será la producción de vehículos con motor a diesel». ¿Contempla el proyecto los motores a diesel?, se le preguntó. Es una posibilidad, fue la respuesta.

Carlos Ghosn dará un impulso importante a José Muñoz (el español ingeniero nuclear que dirigió durante unos años a Nissan Mexicana y luego fue encargado de las operaciones de ventas y mercadotecnia para América Latina). Ahora es vicepresidente ejecutivo para Canadá, Estados Unidos y América Latina. El tercero en el timón de mando, después de William Krueger y Mr. Dodge.

Carlos Tavares, quien fue el presidente de Nissan Américas, fue impulsado como presidente de Renault en Francia.

Nissan no ha podido superar a Honda en Estados Unidos, como es su objetivo. Y con Hyundai tiene dolores de cabeza porque le ha quitado el mercado que deseaba. El reto para José Muñoz es mayúsculo.

Tanto Tavares como Muñoz se caracterizan por ser hombres «duros» en el terreno del trabajo para con sus colaboradores.

Sobre el tema de lo autos con motor a diesel, ahora falta que el gobierno mexicano haga su parte en combustibles de calidad.

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