Ford Powershift 2: Bien en velocidades constantes

Por el Ing. Gabriel Covelli

Una vez que Ford Motor Company ha puesto en nuestras manos el auto Focus modelo Hatchback Trend, versión equipada con motor de cuatro cilindros 2.0 litros de 160 bhp, transmisión automática de doble embrague de seis velocidades (Powershift), hemos completado los primeros 1,000 kilómetros de recorrido desde hace tres semanas.

Los primeros 1,000 kilómetros del Focus con Powershift (Foto Enrique Gijón).

Desde que tomamos el volante, estamos frente a un auto deportivo cuya primera impresión desde el exterior hacia el interior nos proyecta a un automóvil en el que Ford sigue posicionando al modelo Focus como un sedán familiar Sport donde toda su experiencia acumulada en el WRC (Campeonato Mundial de Rally) la plasma en varios aspectos.

Nos acomodamos al puesto de mando rodeados de elementos de buena calidad. Piel de buena retención en los asientos, controles eléctricos para un perfecto posicionamiento, aunque el tablero tiene elementos de color (rojo) y diseño batmanescos, lo que es cuestión de gustos, tomando en cuenta que se busca modernidad en este auotomóvil.

Elementos batmanescos en los controles de instrumentos del Focus (Foto Al Volante).

La transmisión Powershift, bajo términos normales de manejo, es decir en tránsito fluido en ciudad y circulación continua en carretera, efectúa los cambios de velocidades en rangos superiores de rapidez y suavidad a la de una transmisión automática convencional, en razón de un diseño avanzado al utilizar la inserción de las velocidades a través de un mecanismo de doble embrague.

Sin embargo, en tránsitos citadinos muy lentos la respuesta de la transmisión presenta ligeros desajustes entre la respuesta al acelerador como en la dosificación del mismo, con la correspondiente incomodidad del conductor.

En carretera la transmisión acusa excelente comportamiento, pero en tránsitos lentos, no. (Foto Enrique Gijón).

El primer objetivo de nuestra prueba de manejo es hacer una conducción intensiva para definir exactamente cuáles podrían ser las causas que muchos foristas han expresado de la moderna caja de velocidades Powershift, automática.

El comportamiento técnico real nos refiere a una caja del tipo de engranes como cualquier caja manual, con la tecnología avanzada que cuenta con doble embrague, pero Ford y Getrag han ido más allá al hacerla automática.

En Drive todo fluye bien (Foto Al Volante).

De las primeras impresiones que hemos sacado como conclusiones iniciales, es que la respuesta en la manera de operar la Powershift se da en dos vertientes: Función automática Drive (D) y función Sport (S) con una caja de seis cambios hacia adelante más reversa.

En modo D la caja funciona como una transmisión automática tradicional, efectúa sus cambios según el requerimiento de manejo que se necesite para ciudad, a bajas revoluciones o en carretera a las revoluciones tope que no pasan de las 4,000 vueltas del motor, con un máximo de 6,000 rpm para los rebases en autopistas, para lo cual contamos con 160 bhp.

El panel frontal nos da los kilómetros por litro: 11.5 en nuestro caso (Foto Al Volante).

Ford nos habla de un ahorro de combustible del 10%. Nosotros encontramos un consumo promedio de 11.5 Km/l y 12.0 Km/l dentro de la Ciudad de México, con un promedio de velocidad de 22.5 Km/h, con tramos de 60 a 70 Km/h y otros a 15 Km/h. Hablamos de trayectos con congestionamientos de tránsito y donde hacemos hasta una hora para recorrer 15 kilómetros de distancia. Pero estamos hablando de una unidad cuyas puertas son densas, pesadas, resultado de la notable construcción en Alemania. Por tanto, pensamos que la unidad evaluada pesa más que el Focus sedán que se trae de Estados Unidos.

Volviendo a la caja Powershift, objetivo de nuestro análisis y prueba de manejo, adicionalmente, bajo esta situación, se denota un ligero ruido, o «zonajeo» aún no determinado, por lo que seguiremos analizando antes de emitir nuestra opinión.

En modo manual (S) podría generar falta de sincronía de la caja  (Foto Enrique Gijón).

Con referencia al manejo «Sport», es posible que se presente un problema de sincronía entre lo que requiere el conductor, es decir cambiar a una relación más alta o más baja, y lo necesario según las características de circulación en un momento determinado.

Cabe mencionar, que un de las ventajas de la tecnología del doble embrague en modo manual, es la rapidez en la inserción de las relaciones a través de mecanismos más directos como las aletas atrás del volante, situación que se complica por falta de estos aditamentos y en lugar de ellos se tiene que manipular en la palanca de cambios los botones de + y/o – lo que es motivo de confusión para el conductor no experimentado y posiblemente que de esta situación se deriven la mayoría de las quejas.

A nuestro equipo joven le encantaron los interiores del Focus Hatch (Foto Al Volante).

No obstante lo anterior, hemos detectado bajo tránsito lento e intenso en ciudad, que la respuesta de la caja a muy poca velocidad, un comportamiento con respuesta algo imprecisa, aunque ha sido en ocasiones muy raras pero creemos que es un detalle de calibración que Ford está trabajando para corregirlo en estos momentos.

Queremos informar a nuestros foristas que la siguiente evaluación es la de César Roy, nuestro Director, y la tercera será la de Alejandro Díaz, nuestro Coordinador Técnico de los Foros. Serán otras dos opiniones que nos motivarán a una segunda reunión con Ford Motor para expresar nuestras inquietudes.

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