Con -41% en ventas GMM presentará su «reingeniería»

Primero en bancarrota, luego saliendo de la quiebra para reestructurarse de mano del gobierno norteamericano, General Motors ha inventado la «reingeniería». En México ha caído 41% en ventas de enero a junio, y este viernes presentará la que dice ser una nueva cara para el mercado nacional, desesperada por levantarse del tropezón.

Habiendo implementado desde la bancarrota el 30 de mayo hasta la salida del capítulo 11 de la Ley de Quiebras hace unos días una estrategia de comunicación en medios a fin de tratar de resarcir su estripitosa caída en el mercado nacional, General Motors de México lo mismo recurrió a la compra de opiniones de supuestos «expertos» del periodismo de negocios para que convencieran a la opinión pública del futuro y la viabilidad de la empresa en el país.

Salía a cuadro Darío Celis, comentarista de negocios y finanzas en radio y tv, para decir que la empresa llevaba a cabo un programa de «reingeniería», prestando su prestigio y reputación a una verdadera duda sobre el futuro de la firma. Poniendo en riesgo su ética profesional ante verdades a medias.

Lo mismo sucedió con otros comunicadores que, por dinero, prestaron su nombre e imagen en pos de una campaña de relaciones públicas harto agresiva por parte de la firma automotriz.

La realidad superó a toda la parafernalia comunicativa; Las ventas de General Motors de México cayeron hasta un 41% en el primer semestre del año. Por la retracción del mercado nacional por un lado, sí, (la crisis ha causado estragos en todas las distribuidoras de todas las marcas sin excepción), pero también por la gran incertidumbre que privó entre los consumidores por el futuro de la GM y de los modelos por comprar.

La gente no fue tonta. Sabía que adquirir cualquier vehículo de las marcas del grupo de GM significaba un riesgo latente porque si la empresa sucumbía, desaparecía, el precio de sus autos se iría al suelo. El público no quizo arriesgar.

Por lo anterior, General Motors de México sólo vendió en seis meses del año 64,516 unidades que, contra 89,316 de los seis meses del año 2008 representan 24,800 automóviles y camionetas menos. La pérdida es incalculable para los distribuidores y para las marcas del grupo.

En otro esfuerzo por enderezar a la empresa, este viernes se vuelve a convocar a otra conferencia de prensa tratando de convencer a los periodistas de que la empresa va a salir adelante y que el fantasma de la quiebra y la bancarrota quedó atrás.