CLS, Panamera, Rapide: Más que sedanes, coupés deportivos

Recientemente, en presentaciones en diversos Auto-Shows, pudimos apreciar las novedades de la industria automotriz mundial. Entre ellas las más recientes fueron las del Porsche Panamera y del Aston Martin Rapide.

Estos son dos de los autos que van a encabezar una competencia feroz junto con el Mercedes Benz CLS para disputarse el no tan nuevo segmento de los sedanes deportivos coupés de cuatro puertas.

Todo comenzó en el año 2004 con la puesta en venta de un vehículo de este tipo, el Mercedes Benz CLS que marcó un paradigma sobre todo en diseño, ya que este terreno no explorado era un tanto riesgoso y atrevido,  tanto para la casa de la estrella de tres puntas, como para las otras marcas que estaban por llegar a este nicho.

Siendo que Mercedes Benz llegó primero y  quien se había decidido a arriesgar e imponer un nuevo diseño para un nuevo nicho de mercado, lo hizo  logrando objetivos muy concretos,  sobre todo en ventas, ya que su proyecto funcionó y obtuvo el éxito esperado.

Con el paso de los años, otras marcas de super lujo voltearon hacia Mercedes Benz, quien se adueñaba del éxito  cada vez mayor de este nuevo mercado.

Así fue como la competencia para MB inició en el año 2006. La casa de Gaydon, Aston Martin, presentó su apuesta conceptual: el Rapide, el cual conservó ese nombre hasta su producción. La casa alemana BMW también respondió a esta afrenta y en el año 2007 develó su visión de lo que sería un coupé deportivo de cinco puertas, para sólo quedar como un prototipo y no llegar a producción.

Diseño exterior

Esta nueva estirpe de sedanes, caracterizados por dar importancia a la conducción deportiva y dinámica y dejar en segundo término el confort de sus ocupantes, no significa que pierda esa comodidad o exclusividad que los  identifican.

Partiendo de la parte frontal encontramos que son autos de prestaciones altas, y es por eso que incorporan propulsores de alta cilindrada y potencia. Deben integrar  un espacio muy  amplio en la parte delantera, con grandes  capós bien estilizados de corte deportivo, logrando ser muy curveados  incorporándose  al ras de  las salpicaderas.

Además, hablando de las parrillas en estos vehículos, se nota de forma muy acentuada la identidad de marca que en el Aston Martin es doble  y prominente, por lo que está flanqueada de otras tomas de aire, donde su función es asistir a los grandes motores y para enfriar los frenos.

En la chapa lateral el trazo de la línea de cintura en estos vehículos es muy baja casi sobre las salpicaduras. La percepción  que impone  es la de dejar muy marcada esa deportividad,  al estilo de los coupés de tres puertas.

Sus lunas laterales (ventanas) y la altura total del greenhosue (cabina), cuentan con un trazo de perfil muy limitado en su tamaño; es decir, menos  altura que un  sedán largo que continúa con ese lenguaje de vehículo dinámico amplio y divertido.

Sus cotas (dimensiones del vehículo) son más las de un sedán mediano que las de un coupé, teniendo longitudes que apenas sobrepasan los cinco metros, anchuras un tanto prominentes de dos metros y  con una altura que ronda el metro y cuarenta centímetros.

¿Es un coupé o un sedan de cuatro puertas?

Efectivamente, es una pregunta que te puedes hacer al estar frente a esos vehículos que ahora ya complementan un nuevo segmento de vehículos deportivos de cuatro puertas tales como el Porsche Panamera, Mercedes Benz CLS, BMW CS Concept y Aston Martin Rapide, que vienen a hacer un nuevo espacio en el mercado de los vehículos sedanes o coupés de alta gama.

Para concluir el apartado de diseño exterior,  todos ellos se caracterizan por tener volúmenes prominentes en la parte frontal, una línea baja de perfíl y dinámica que va a caer en la parte posterior y se incorporara  al tercer volumen, ya que  es  más reducida en sus dimensiones que la frontal. Y por supuesto la combinación de un auto de las prestaciones de un Gran Turismo con el lujo y confort de un sedán largo de cinco puertas,  lo que hace muy excitante su conducción.

Diseño interior

Esta clase de vehículos de nueva generación fueron pensados principalmente con dos objetivos: Dar  mayor importancia a la conducción dinámica y deportiva (lo que se quería lograr era precisamente una sensación de manejo deportivo, lo que se obtiene dándole protagonismo a la conducción y por lo tanto al conductor, así como un énfasis al puesto de mando,   orientando   la instrumentación y demás elementos de manipulación del interior hacia él) y segundo que esa misma sensación de manejo deportivo se pudiera transmitir a los otros ocupantes, siendo así vehículos de tan sólo cuatro personas, bien posicionadas en asientos tipo cubo y  sin perder el confort que también los caracteriza.

En efecto, la disposición de los asientos es baja y con poca interacción en sus plazas traseras, esto es que cada usuario de la parte trasera tenga acceso a entretenimiento de manera individual, optando por pantallas de última generación colocadas en los respaldos de los asientos delanteros.

Una consola central,  muy marcada en la parte posterior hace que sea muy delimitada la comunicación entre sus cuatro ocupantes.

Los materiales del interior son los de esperarse, mezclando  piel, aluminio y plásticos de alta calidad. Los diseños difieren entre las marcas, algunos un tanto conservadores como los del CLS de Mercedes, y otros más radicales como los del Rapide y del Panamera, pero sin ello perder el deportivismo y lujo que los abandera.

En conclusión, los sedanes 2 + 2 coupés deportivos son autos que ahora incorporan más espacio. Sus diseños son totalmente fieles al lenguaje de estilo  de cada marca. Algunos lograron fusionar perfectamente la proporción de sedanes con vehículos donde el diseño se antepone (autos Gran Turismo).

El Aston Martin Rapide es el mejor logrado en cuanto a diseño junto con el CLS de Mercedes Benz (versión actual), ya que logra verse definidos en sus trazos y bien proporcionados volúmenes, a diferencia  del Porsche Panamera con trazos muy fluidos que se aprecian mejor en sus autos deportivos, pero no tanto en su sedán de nueva generación.

En su parte posterior el  Rapide logra una mejor caída de su trazo del medallón trasero que la del Panamera, ya que puede notarse un tanto forzada y no bien concluida, lo que hace que el Porsche tenga un frontal muy impactante y un posterior nada interesante.

(Imágenes de Car Body Design, Net Car Show, Carlovers y BMWcop).