Suzuki Grand Vitara: Practicidad a toda prueba

No es una camioneta común y corriente. Tiene un encanto que se llama Suzuki, pero por la potencia de otras pareciera que no está completa en todas las fases de su evaluación. ¿Por qué? Porque la motorización no resuelve lo que otras sí. Tiene distinción, lo que otras no tienen. Pero, le sigue faltanto el punch que pagamos por ese precio: $349,000 pesos. Motor 2.4 y 163 HP. Deberían ser suficientes, pero todo depende de su gusto y sentido ecológico para no gastar de más en gasolina. Una buena adquisición.

Suzuki Grand Vitara, tiene clase, es discreta y cumple ahorrando combustible (Fotos Al Volante).

Estamos a bordo de una camioneta utilitaria que no es demasiado grande ni pesada. La primera sensación es que le falta potencia, pero a la hora de ver cómo «respira» su motor, nos damos cuenta que los ingenieros de Suzuki no han desgastado en vano su esfuerzo por ofertar productos eficientes. Para lograr los 163 HP es necesario apretar el acelerador sin miedo. El límite es ¿cuánto quiere gastar a la semana en combustible? Y entonces esta camioneta logra su cometido ecológico. Caminar, hacerlo bien y no gastar en demasía.

La buena «respiración» se logra por la apertura variable de válvulas, que se toman su tiempo para accionar. La Grand Vitara detecta el tipo de manejo que usted quiere hacer y entonces entrega caballos aunque con un mayor consumo de combustible. Si lo que quiere, como debe ser en una utilitaria, es pasear y no correr, entonces tendrá pesos de ahorro en las visitas a la gasolinera a la semana.

Al volante es una clásica, tiene lo que se necesita. No hay peluches.

Ya en el camino usted notará que le cuesta trabajo responder si quiere lograr rápidamente más de 100 Km/h. Y también la caja de velocidades con una transmisión automática de cuatro cambios, pues no nos hace hablar de las mejores condiciones. Pero, repito, todo es cuestión de ver que se trata de un vehículo ahorrativo. ¿Las camionetas utilitarias se hicieron para ir a más de 120 Km/h? Parece que las de 600 mil pesos sí. Esta no cuesta eso.

La suspensión es firme y no demasiado suave, lo que se agradece a comparación de las viejas estadunidenses que en verdad «lancheaban» de lo lindo. Acá tenemos MacPherson adelante y una Multilink atrás que es un sistema independiente que permite comodidad y firmeza en las curvas. Esto se agradece si usted lleva tres maletas atrás y cinco pasajeros a bordo. Firme en su conducción, aceptable geometría de suspensión y avance firme. Un buen vehículo para lo que usted está pagando.

Una compacta ideal para la ciudad.

Traemos unas ruedas de 18 pulgadas, lo que se agradece porque pasa topes y charcos con hoyos sin problema. Pero no es demasiado alta. Mantiene un tamaño adecuado, compacto, citadino. Usted puede olvidar por momentos que está a bordo de una camioneta y puede sentir el placer de conducción de un sedán, pero para eso mejor se compra un sedán que pesa 300 kilos menos.

Esos 4.5 metros de largo se pueden estacionar regularmente. No se necesita una gran cochera para albergarlo. Y el 1.6 de altura tampoco nos impide a darle un trato casi de auto.

Los asientos traseros permiten amplitud para las piernas. Claro, poniendo todo en orden.

El puesto de mando es cómodo. Los asientos nos permiten una buena conducción y con apoyo necesario para la pierna izquierda. El volante se regula para lograr mayor placer en el manejo. Los controles están a la mano y su conducción es fácil pues se tienen instrumentos entendibles. No hay botones de más.

El frenado es uniforme contando con todo tipo de apoyo en ese sentido. Convendría hojear la ficha técnica en www.suzuki.com.mx donde vienen detalles de la unidad, a fondo.

La apariencia quizá ha dejado de ser interesante desde este punto de vista.

Los frenos de disco en las cuatro ruedas se agradecen. Los rines son atractivos. La rueda de 18 pulgadas cumple su cometido, altura para pasar baches y un vehículo soportable ya con la carga de los cinco pasajeros y maletas para viaje. Y las llantas no son demasiado anchas de forma que no se «arrastra» el hule (demasiada anchura gasta más gasolina, aunque no lo crea). El frenado no se agota, por lo que la efectividad en este rubro está bien alcanzada.

Ya en el consumo no se puede pelear tanto porque hemos decidido comprar un vehículo que es más pesado que un auto. Por tanto, estemos conscientes de ello. El motor de cuatro cilindros sigue dando adeptos para un mejor desempeño en el aspecto de rendimiento. Sí, hay motores más grandes que le van a incrementar potencia, pero también las visitas a la gasolinera. Escoja a tiempo lo que prefiere y lo que quiere.

El motor es en línea y ofrece un buen comportamiento para ser de cuatro cilindros.

La versión básica es la GL de $318,800 pesos. Le sigue la GLS, como la que manejamos, de $349,000 y la super equipada de $381,300 pesos. Insistimos, vea la ficha antes de comprar. Y haga su prueba de manejo.

En conclusión, la Grand Vitara tiene un manejo aceptable. Su diseño no es lo más atractivo, auque la parte trasera sí lo es por aquello de la rueda afuera del vehículo (que a muchos gusta, a otros no por la seguridad). No acelera como otras pero lo hace aceptablemente para traer un motor de cuatro cilindros. Tiene un tamaño adecuado para el manejo citadino. Es ahorrativa si se busca ese propósito sin olvidar que compró un vehículo más pesado que un sedán. Tiene un excelente valor-precio (lo que pagas y lo que recibes), así como valor de reventa.

Esta apertura del maletero no es lo mejor que encontramos.

Le vamos a poner 8.5 de calificación del 1 al 10. Suzuki Grand Vitara es un producto de calidad. No se apanique con aquello de que la marca ya no se vende en EEUU porque acá nos llegan los productos fabricados en Japón. La marca tiene para nuestro País planes de crecimiento por lo que no hay un riesgo inminente.

Definitivamente no es una camioneta para correr. Si usted busca este ingrediente en las cualidades de lo que desea comprar, deberá voltear hacia otros vehículos.

El modo de controlar la transmisión se ha quedado un poco atrás.

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