Las foto-multas, un programa anticonstitucional implementado por Miguel Mancera, fuera del proyecto de la ciudad, y ahora vigente en otras entidades del País, habiendo recabado $1,350 millones sin destino conocido (de los cuales $1,200 millones son por foto-multas «fantasmas»), con fines recaudatorios más que correctivos, son una pesadilla para el automovilista. Hay que ampararse ante aquellas fraudulentas prácticas a la hora de verificar el auto, dice el Dr. Óscar Valdez, abogado promotor de los derechos del ciudadano. El amparo no es para no pagar infracciones, sino por aquellas que son inventadas y sin comprobación alguna del delito.
Óscar Valdez, de frente contra la corrupción gubernamental (Foto de Al Volante).
El Doctor en Derecho viene peleando desde hace años atrás contra los abusos de los gobernantes corruptos, tanto del Gobierno Federal como del Estado de México y otras entidades, ahora de la Ciudad de México. Ha sido incansable pero nos dice, en entrevista, que sin la acción de los ciudadanos no se logrará nada. «Un ciudadano informado es un ciudadano con Poder», nos dice.
Con él tratamos básicamente dos temas: Las foto-multas «fantasma» que inventa el gobierno de la CDMX, y a las que el ciudadano debe ampararse, y «el gasolinazo». Esta segunda entrevista la entregamos al público en nota aparte.
«Quiero aclarar que yo no estoy en contra de que se aplique la ley en el caso de las foto-multas, si este programa fuera correctivo, educativo de infringir velocidades espantosas en la Ciudad de México y otras capitales. El problema es que se han inventado una larga lista de excesos de velocidad que no existen, que nunca existieron (foto-multas «fantasma») pero que el ciudadano con automóvil tiene que pagar a la hora de hacer su verificación semestral o anual y que está solo, abandonado, en el proceso de reclamarle a la autoridad por una arbitrariedad, ya que cuando llegas a verificar tan sólo te dicen que debes tanto dinero sin que exista comprobante o foto alguna de la manera como, según la autoridad, infringiste la ley», afirma durante la charla.
El Programa de Foto-Multas lo llevan a cabo cinco personas, colombianos los propietarios de la empresa Auto-Trafic. Usan las mismas cámaras (no pasan de 100) que el Gobierno de la CDMX tiene instaladas a través de la Secretaría de Protección y Vialidad. Y la utilidad de la empresa es de $700 millones de pesos al año. Un negocio super redondo.
¿Cómo saber si realmente infringiste la ley con una velocidad excesiva o te inventaron la multa?
— ¿Qué hacer Doctor, en el caso de que te estén multando con una infracción inventada?
— El automovilista debe pedir el recibo del pago que haga por la foto-multa hechiza o de mentiras. Una vez que tenga el recibo en sus manos, debe entrar a www.oscarvaldez.mx y hacer la denuncia correspondiente, para luego presentarse en el Colegio de Multas, ubicado en las calles de Corregidora 123, con ocho copias de la denuncia, y con ello obtener el amparo. Pero si 10, 100 ó 1,000 automovilistas que hayan sido engañados se amparan, no será suficiente. Tenemos que hacer trabajar a la Suprema Corte de Justicia con tal número de amparos que no les quede otra más que atender al ciudadano y así acabar con la corrupción por foto-multas «fantasma».
Pasos para ampararse por foto-multas no reconocidas:
- Pagas la foto-multa (no reconocida).
- Imprimes la demanda de amparo que se hace por Internet (www.oscarvaldez.mx).
- Sacas ocho copias de la demanda de amparo. Firmando cada una de ellas.
- La llevas al Juzgado Administrativo (en CDMX está en Las Flores, por Periférico Sur).
- (El formato en el interior del País es el mismo, sólo hay que buscar el Juzgado).
- Ganas el amparo y el Gobierno estatal te regresa el importe de lo que pagaste.
Óscar Valdez recuerda el origen de las foto-multas: «Te llegaba a tu domicilio tu foto-multa y tenías unos días o semanas para pagar. Ahora la autoridad ni siquiera se molesta en ello. Hasta que te presentas a recoger tu auto en el corralón por alguna falta (estacionarte en lugar prohibido) o vas a verificar tu auto, es entonces que te dicen que debes cierta cantidad por concepto de foto-multas, sin haber comprobante de por medio, y si no pagas no puedes recoger tu unidad del corralón o verificar la unidad. Prácticamente te tienen atrapado porque a ti te urge tu auto para trasladarte».
Por cierto que el programa, con el mismo proveedor, opera en CDMX, Guadalajara, Monterrey y en el Estado de México. No está legislado el programa y, por lo tanto, no hay licitación. Por cada peso recaudado, 40 centavos son para la firma Auto.Trafic y 60 para el gobierno local o sus funcionarios. Sin pasar por las Tesorerías.
Bajar la velocidad, sí, pero no ver al automovilista como presa para sacarle dinero.
Cuenta su caso. Mandó verificar su camioneta y le dijeron que tenía un adeudo de siete mil pesos. ¿De qué?, preguntaron, y le dijeron que se tenían tres foto-multas. No te dan copia, no tienen las fotos en el sistema. Si no pagas, no puedes verificar y tu auto se queda automáticamente sin verificar. A la hora de pagar las foto-multas había una tremenda fila y se preguntó a la gente a qué iban. Iban a pagar foto-multas. Pidiendo las copias a la Secretaría de Vialidad, le mandan las foto-multas recordando que su camioneta estaba en el taller de la agencia en reparación, por lo que las foto-multas no procedían (a menos que la agencia haya sacado del taller el auto, pero no fue así a la hora de ver los videos). Las fotos fueron por otra instancia y el abogado impugnó las foto-multas. Se concede el amparo y se va la revisión de la autoridad, se gana el amparo en la Corte pero esta olvidó la constitucionalidad o no de las foto-multas que deben venir cotejadas por alguna autoridad. El caso se fue para largo pero el abogado ganó el amparo y le fue devuelto el dinero.
En 2017 se recabaron $1,350 millones de peso por concepto de foto-multas. De ellos, $1,200 millones de pesos son por foto-multas «fantasmas». El gobierno de la CDMX en vez de hacer una cultura real de la prevención de accidentes por exceso de velocidad, como el conocido de la avenida Reforma en donde fallecieron varias personas, que la simple recaudación de dinero.
El negocio de las foto-multas no está legislado, no aparece en el programa anual de gobierno. Por lo tanto, no se le puede exigir al jefe de Gobierno de la CDMX, Miguel Ángel Mancera, rendir cuentas. ¿A dónde va ese dinero? Puede ir al propio jefe y al grupo de personas con el que hace la implementación del programa.