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Robert Kubica, al volante de un BMW, le quitó por unos segundos la pole position a Lewis Hamilton en la prueba calificatoria del Gran Premio de Australia, primera fecha del campeonato mundial de la Fórmula Uno, pero el gusto le duró poco. En segundo Kubica y tercero el compañero de Lewis, Heikki Kovalainen, el finlandés que paró los cronos en 1:25:452 minutos.
Hekki Kovalainen, de McLaren Mercedes, arranca en tercero en GP de Australia.
Pero el inglés rodaba rápido y el gusto no le duró al team alemán más que eso, unos segundos. Hamilton alcanzó su primera pole del año con tiempo de 1:25:187. Su dolor de cabeza, de momento, no se llama Fernando Alonso, que quedó en la décimo segunda con 1:26:188, sino Kubica, un nuevo protagonista del máximo circo en la carrera que arrancará este sábado a las 10 de la noche más o menos en el tiempo de México y que transmite Fox Sports (o bien un brevísimo resumen y los resultados el domingo a las 8.44 AM en Tele Fórmula Canal 176 de Cablevisión y 104.1 FM de Radio Fórmula con los comentarios de Ramón Suárez que se estrena como comentarista deportivo con nosotros).
El mejor clasificado de Ferrari fue Felipe Massa, el brasileño que bajó al cuarto lugar con 1:25:691, luego que Kubica hiciera lo inesperado. Kimi Raikkonen tuvo problemas con los inyectores de combustible lo que lo relegó hasta la posición 16 con tiempo de 1:26:140 minutos.
El otro piloto de BMW, Nick Heidfeld, se colocó quinto con 1:25:518 minutos y Fernando Alonso, ahora con Renault, arrancará en la posición 12. Nada contento el asturiano que se enfrenta a la verdad de no estar con los equipos favoritos.
Podemos vaticinar mañana varios despistes porque sin el control de tracción las cosas no serán fáciles para nadie. El manejo, las manos, ahora sí se ponen a prueba. Los nervios de acero se medirán en las yemas de los dedos. Se requiere mucha paciencia y no perder el control que sería catastrófico para cualquiera.
Hoy en la clasificación ya se dieron las primeras muestras de que cualquier descuido puede hacerles perder el auto y por tanto la participación en un campeonato que apenas comienza.
Las autoridades gubernamentales en Melbourne no quisieron doblegarse a los caprichos de la FIA de querer hacer una carrera noctura en pos del rating televisivo. Pero incendios en el Sur de Australia y una posición ambientalista muy exigente, son dos ingredientes en contra de esta carrera.
